IN MEMORIAM
Una carta. Un legado de amor
Mi Güerito, asi era como te llamaba.
Cada día le doy gracias a Dios y a la vida por haberme permitido compartir 35 años de mi vida con un hombre tan maravilloso como vos. Pienso en vos cada día de mi vida y lo que mas recuerdo es tu positividad, tus ganas de trabajar, tu honradez, tu preocupación y amor por mi y tus hijos y hasta recuerdo el gran bailarin que eras. Nunca te quejaste y ni siquiera en los momentos más difíciles, en vos siempre había un sonrisa.
Quienes te conocieron saben que eras un hombre fuera de serie.
Y quizás no lo creas pero me enseñaste tanto, no solo con tu pasión por el café, por el campo, amor a la vida sino por tus ganas de compartir y ayudar a los demas: Ese es el gran legado de amor que nos has dejado, y el que nos contagiastes.
Quiero que sepas que este Café sos vos. Es una forma de mantenerte vivo junto a nosotros, mientras compartimos esa pasion con muchas otras personas.
Queremos que todo el mundo sienta todo el cariño y la dedicación que hay detrás de cada taza de café. Que descubran la maravillosa historia de amor, de esfuerzo, de esperanza que transmite cada taza, por más pequeña que sea.
Si al menos a una de las personas que nos visita hoy le sacamos una sonrisa, mientras disfruta el café de Altura, de nuestro hermoso pueblito del norte de Nicaragua, llamado Jinotega sabremos que vamos por buen camino; porque vos también estarás riendo desde donde estés. Siempre te amaré y te extraño cada momento, hasta pronto mi amor
Mi papi,
Hay tanto que quiero decirte… Han cambiado tantas cosas desde que te fuiste…
¿Recuerdas ese sueño que siempre compartimos de abrir una cafetería? Bueno papi, adivina qué… ¡Lo estoy haciendo! Y quiero que sepas que todo es gracias a ti. Sé que estoy preparada, y el camino que vos y Dios han puesto en mi vida para seguir, lo ha demostrado, puedo sentirlo.
Y vos eres la razón de todo. Me mostraste el amor que derramaste nuestra hacienda y me conmovió. La forma en que cuidaste a los empleados y el respeto que te tienen es tan conmovedor. Eso demuestra lo increíble que eras como persona/jefe.
Eso es algo que yo también quiero ser para ellos. Alguien con quien puedan contar. Alguien a quien respeten. Mi objetivo es tener éxito y devolver a las comunidades de Nicaragua, empezando por nuestro personal y sus familias. Y esas metas empezaron con los recuerdos que tuve de niña yendo a Nica y regalando ropa y comida a las familias más necesitadas, porque es uno de los momentos más especiales que tengo guardados en mi corazón. Vos y mami me lo enseñaron. Me enseñaron a ser apasionada, humilde y generosa. Y por eso sé que la industria del café es para mí.
El café era una de las muchas pasiones que solo vos y yo compartíamos. Y eso me encantaba, era nuestro vínculo como papá y su niña. Siempre me gustó hablar de ello y aprender más de ti. Los recuerdos podrían ser eternos.
Hace poco, Laurita mi (primita) me llamó y me dijo que había soñado contigo. Ella estaba caminando hacia nuestra cafetería durante la apertura y te vio sentado afuera con una gran sonrisa en tu cara, bebiendo una taza de café de altura y leyendo el periódico. Sintió tu presencia y sabía que tenía que decírmelo. Cuando lo escuché, fue algo agridulce que me hizo llorar. Pero también me reafirmó que Stemma Craft Coffee está cumpliendo su propósito… tu legado y tu recuerdo.
Te echo de menos cada día. Y sé que en el momento en que abra las puertas al público, estarás a mi lado con una gran sonrisa en la cara dando la bienvenida a todo el mundo. Papi, espero que te sientas orgulloso de mí.