Nuestra
Historia

Muchas personas se preguntarán cómo una familia que vive en Orlando, FL tiene acceso a uno de los mejores cafés de Nicaragua. Bueno, todo comenzó hace 4 generaciones, en el año 1960 cuando Zacarias Blandon comenzó a cultivar café en las montañas de Jinotega, Nicaragua. Un paraíso para el cultivo de café, su ubicación a 4429ft sobre el nivel del mar, lo convierten en el lugar ideal para producir café de la mejor calidad.

Con cada generación el proceso de cultivo se fue mejorando, vivimos épocas difíciles, lluvias a raudales que amenazaban con dañar la cosecha y otras tantas complicaciones; pero el amor, el trabajo en equipo y la constancia nos mantuvieron siempre firmes y lograron que lleváramos a feliz término cada proyecto.

Y desde ese lugar bendecido continuamos produciendo el mejor café de Nicaragua, que ha representado a nuestro país en múltiples eventos de alto perfil como la Taza de la Excelencia, el Salón de los Oscars, el Salón de los Emmys y la Fundación George López.

Nuestra Hacienda

Era el año 2007, Marvin tenía un empleo estable como conductor, pero por cosas de la vida tuvo que tomar la decisión de dejar ese empleo y regresar a su pueblo. Regresaba junto a la familia, pero perdía la estabilidad laboral que tenía.

Fue en ese momento que conoció a Alvaro Blandon quien le ofreció la oportunidad de Administrar una finca productora de café.

En sus palabras: “El Doctor, puso su confianza en mí y con los años entablamos una relación muy estrecha más que un jefe, era mi amigo sincero, leal, transparente en su actuar y justo a la vez”.

Juntos lograron cumplir con cada objetivo que se trazaron, con valentía. Hoy en día de hoy Marvin sigue cumpliendo esos objetivos mientras le parece escuchar la voz de su jefe y amigo decirle: ¡Para atrás ni para tomar impulso!

En la Hacienda “La Misericordia” no hay empleados, todos son una gran familia que trabaja unida, celebrando los logros y superando dificultades, pero sobre todo pensando que su esfuerzo impacta la vida de otras personas, que también los necesitaban, sobre todo nuestra gran comunidad nicaragüense.

Marvin

Director de Operaciones
en la Hacienda en Nicaragua